Cuando detecte algún síntoma de los que indicamos a continuación, le recomendamos que acuda a su dentista.
• Sensación de frío y/o calor al masticar alimentos: Suele producirse cuando alguna pieza dental tiene alguna caries, abrasión o erosión.
• Enrojecimiento de las encías: Puede ser la causa de un principio de gingivitis, cuya causa principal es la mala higiene bucal. También factores como el embarazo o ciertos medicamentos producen enrojecimiento.
• Sangrado de las encías: Viene como una evolución del enrojecimiento.
• Mal aliento o halitosis.
• Mala posición de los dientes: Redunda en una incorrecta masticación, dificultad a la hora de limpiarse los dientes, etc., que perjudica la salud bucal y favorece el aumento de las caries, enfermedades de las encías y en ocasiones puede producir trastornos en el habla y en el desarrollo de los maxilares, además de que deteriora la estética de las personas. Es el caso de apiñamiento dental, prognatismo (dientes inferiores adelantados a los superiores), etc. Se corrige en general con ortodoncia.
• Dolor. Puede ser causado por algún problema en alguna pieza dental (caries), por problemas de encías, etc.
• Piezas dentales que se mueven: Suele ser la consecuencia de un problema en la encía y el hueso que sujeta los dientes (enfermedad periodontal o piorrea)
• Rotura de parte de alguna pieza dental. Como consecuencia de haber masticado algún producto duro con un diente desvitalizado o muy reconstruído. Es el caso de las cáscaras de los frutos secos. También en pacientes apretadores diurnos o nocturnos (bruxistas).
• Pérdida de alguna pieza dental. Cuando es por deterioro de la misma, se producen en breve muchos cambios alrededor de la misma. Las piezas adyacentes se mueven y la nueva malposición favorece la aparición de caries y problemas de encías. La opuesta crece (erupción pasiva) buscando el contacto y tambien su alrededor se deteriora.
La pérdida dental puede ser consecuencia de un golpe. En dientes definitivos se aconseja poner la pieza debajo de la lengua, en suero o en leche (sin frotarla en aulquier caso) y acudir rápidamente al dentista. Puede salvarle la pieza. Los dientes temporales no se reimplantan.
• Piezas que presentan tonalidades grises: Se pueden tratar mediante técnicas de blanqueamiento dental.
• Desgaste de las piezas dentales: Suele ser muy habitual en personas con estrés que aprietan mucho unos dientes contra otros (a esta personas se les llama “bruxistas”). Estos procesos que se pueden controlar durante el día, no pueden controlarse durante la noche. En ocasiones generan fuertes dolores de cabeza. Para evitar este proceso destructivo existen unos dispositivos llamados “férulas de descarga”, consistentes en unos plásticos especiales que se adaptan a los dientes de su boca, que te permiten eliminar tensiones, en especial durante las noches, evitando el proceso de desgaste y eliminando otros problemas tales como los dolores de cabeza, desgastes del menisco de la articulación etc.
• Caries: Lesión del diente consecuencia de la acumulación de bacterias (placa dental). Se corrige reparándola. Es lo que se llama obturación.
• Gingivitis: Enrojecimiento de las encías causado por las bacterias de la boca y de restos alimenticios. Suele producirse cuando la limpieza no es adecuada. Las encías aparecen rojas y a veces inflamadas. Generalmente no produce dolor. Esta enfermedad puede evolucionar, producir sangrado y hacerse crónica, creándose bolsas, movilidad dentaria y pérdida de hueso.
• Periodontitis: Es la situación a la que llega la gingivitis, si no se trata. El periodonto es el tejido que sujeta los dientes. Está compuesto por la encía, el hueso alveolar, el cemento radicular y el ligamento periodontal. Esta enfermedad puede evolucionar de forma rápida si no se detecta y trata a tiempo y conlleva la pérdida de piezas dentales.
•Retracción de encías: se produce por un cepillado agresivo, un cepillo duro, enfermedades de encías no tratadas o tratadas de forma tardía, frenillos cortos, piercings, contactos prematuros en la oclusión… En todos los casos hay que tratar la causa y en ocasiones hará falta un injerto de encía para fortalecer la misma.